No te rindas

Saludos.

Bendiciones a todos. Desde ayer viernes me encuentro hospitalizada en un estudio de monitoreo intensivo para pacientes de epilepsia. Esta no es la primera vez que paso por este proceso. Antes del 2006 yo había sido hospitalizada con el mismo propósito en el hospital municipal de San Juan P.R.  obviamente en aquel momento con una tecnología muy distinta a la áctual pero la realidad es que fuí muy llena de ilusiones y esperanza pero al terminar resultó que aunque no pudieron explicarme el porque todo lo que habían grabado se borró y lo único que recibimos fué una disculpa.

Luego al pasar unos años decido ir a el hospital Mayo Clinic en Minnesota para los mismos estudios buscando cual era la razón de mis ataques de epilepsia y una posible solución. En ese hospital estuve 21 días. También llegué con la mayor de las ilusiones pero me fuí con un gran desencanto. Me habían encontrado de donde se originaban mis convulsiones era del lado temporal izquierdo pero no podían operar porque era un área muy sensible el área de la memoria y el habla y los riesgos eran muchos. Regresé a Puerto Rico un poco frustrada pero decidí no rendirme y seguir adelante.

Luego cambié de doctor en Puerto Rico buscando otra opinión. El decide hacerme otro monitoreo intensivo y me hospitaliza en el hospital Hima de Caguas. Mientras estaba hospitalizada le dije a Dios lo que me digas que hagas eso haré. Al finalizar la hospitalización el doctor me dice tenemos que hablar," Aunque no podemos descartar del todo una cirugía no puedes continuar trabajando. Te voy a llenar los papeles del Seguro Social". Le pedí a él y a mi esposo que me dejaran a solas pues quería internalizar todo. Oré a Dios y le dije " para que estudié tanto si ahora no voy a poder trabajar" mas había dejado todo en las manos de Dios y debía obedecer. Presenté mi renuncia mas no me rendí. Seguí en pie de lucha. Y un tiempo mas tarde recibí la llamada de mi doctor para decirme que me estaban considerando para una cirugia. Pensaban ponerme el VNS o estimulador del nervio vago. Le consulté a Dios le pedí una señal la cual me fue confirmada y me sometí a la cirugia aunque fuí con la mayor de las ilusiones de no convulsar mas , ese no fué el resultado. Mejoré pero el problema continuó. Sufrí  una leve decepción pero no me dí por vencida continué la lucha de la mano de Dios.

Ahora vivo en Georgia E.U. y mi nuevo doctor a indagado mucho en como podemos trabajar con la situación. Para mi última cita estuve orando mucho antes de ir y fuí con mi esposo pidiéndole a Dios que iluminara al doctor y que el doctor fuera un instrumento suyo para ayudarme. Ese día el doctor me dijo que me iba a hospitalizar nuevamente para hacerme nuevamente todo los estudios y ver como se encuentra mi cerebro en este momento. Por un momento pensé nuevamente todo este proceso, pero luego reflexioné que yo le había pedido a Dios su intervención y debía respetarla. Ayer me ingresaron aunque durante la semana estuve en distintos estudios.

Que le puedo decir nunca pierdan su fé no importa lo que esté sucediendo en su vida o cuantas veces lo haya podido intentar sin obtener resultados si Dios le dice que lo hagan no cuestionen. Dios tiene su momento para cada cosa y el no se equivoca es perfecto. Yo llevo en esta batalla 25 años pero lo mas importante es que Dios la ha batallado junto a mi. En cada hospitalización hubo un adelanto aunque el paso sea lento se que de la mano de Dios llegaré ha donde el quiera llevarme pero nunca entreguen la batalla porque una vez la entreguen habrán perdido la guerra.

Salmos 121:1-2 dice "Levantaré mis ojos a los montes; de donde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor , que hizo los cielos y la tierra."

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