Nunca dejes de soñar

Saludos

Quiero ofrecer mis excusas por el tiempo que he estado sin escribir y comunicarme con ustedes, he estado  trabajando en la redacción de un libro al que espero puedan tener acceso en poco tiempo.

El tema de hoy se trata de que nunca debemos dejar de soñar. Los sueños muchas veces son el principio de una realidad en nuestras vidas. Pero un paso sumamente importante es poner cada sueño en las manos de Dios para que él que conoce nuestro pasado, presente y nuestro futuro pueda ayudarnos a convertir ese sueño en una realidad o nos ayude a cambiar nuestra visión, de ese camino no ser el mejor en nuestras vidas.

En mi caso personal a lo largo de mi vida he tenido muchos sueños entre ellos ser una profesional, casarme y tener hijos. Hoy quiero compartir con ustedes un poco respecto al sueño de ser una profesional exitosa. Desde niña cuando yo pensaba en ser una profesional soñaba con ser una gran abogada y una gran política que pudiera ayudar a muchos. Eso me motivaba a estudiar y tratar de obtener buenas calificaciones. Pero fui creciendo y pude comenzar a ver que en muchas ocasiones la carrera de abogacia es una comprometedora y en la cual no siempre podemos hablar con la verdad. Sentí que pudiera tener en ocasiones conflicto con mis valores y tomé la desición de no tomar ese camino. Luego tuve la capacidad de entender más de la política y definitivamente el ambiente político de mi país natal comenzó a desepcionarme y tomé la desición de cambiar de rumbo.

Reenfoqué mis visiones y tomé la desición de dedicarme al mundo empresarial. Estudié Administracion de Empresa con especialidad en Gerencia Industrial. Pero al terminar me pude dar cuenta que esa profesión en mi país no tenía muchas oportunidades de empleo porque la mayoria de las fábricas habían cerrado. En ese momento no quería abandonar mi país y tomé la desición de no dejar de soñar y decidí hacer la maestria en Administracion de Empresa con especialidad en Contabilidad. Al finalizar ya estaba casada con un hijo y dediqué muchos años de mi vida a la Contabilidad. Pensaba que mi vida era perfecta hasta que la enfermedad se apoderó de mi cuerpo sin querer abandonarme. En ese momento todo parecía obscuro y mis médicos me indicaron que no podía continuar trabajando. Pero no dejé de soñar y de poner mis preguntas, miedos y planes en las manos de Dios. El tiempo pasó y pude observar como en muchas ocasiones podía ayudar con mis testimonios a otros que estaban pasando por situaciones díficiles a no rendirse y buscar refugio en las manos de Dios. Como los podía ayudar a entender que los tropiezos muchas veces  nos pueden llevar a modificar un sueño o sustituirlo por otro pero nunca nos debería llevar a la posicion de no querer soñar. Llegó a mi vida el momento de ir a vivir a otra nación y de no posponer más la desición. Lo acepté y continué mi rumbo con mi esposo e hijos de la mano de nuestro Dios.

En ese momento comenzé el sueño de escribir un libro y hoy puedo darles la noticia de que ayer terminé la redacción de ese libro. Comienzo ahora el sueño de la traducción del libro a mas idiomas y la publicación del mismo. Que les puedo decir en la vida tenemos altas y bajas. También cambio de planes pero mientras Dios viva en nosotros existirá en nuestras vidas el deceo de soñar. Recuerden que Dios es nuestro Padre y que padre hay entre nosotros que desee que su hijo pierda la capacidad de soñar y si nosotros siendo humanos y pecadores sabemos dar cosas buenas a nuestros hijos cuanto más nuestro Padre que esta en los cielos dará cosas buenas a aquellos que se lo pidan. Pero recuerden que no siempre lo que pedimos nos llevará al camino de la felicidad. Cuando lo que pedimos no nos llevará al camino del bien Dios guardará silencio así como cuando nuestros hijos nos piden algo que sabemos no es para su bien y nosotros se lo negamos. Pero eso no significa que debemos dejar de soñar simplemente que debemos cambiar el rumbo que llevamos pues no es el camino que nos llevará a la meta deseada.